Cuando Arch Coal se declaró en bancarrota en enero, fue solo la señal más reciente de que la industria del carbón enfrenta un problema grave. En el año pasado, cuatro de las mayores empresas de carbón han solicitado la ejecución del Capítulo 11, paralizadas por la enorme deuda y la caída de la demanda. Y esto puede ser solo el comienzo: un reciente informe de la firma consultora McKinsey & Company llegó a la conclusión de que la industria está en una contracción dolorosa y que se encuentra “todavía en las primeras etapas de lo que podrían ser décadas de dificultades financieras”. Para cualquier persona preocupada por el cambio climático, la perspectiva del encogimiento de la industria del carbón es una buena noticia. Pero puede venir con una consecuencia preocupante, gracias a una disposición de la Ley de Control y Recuperación de la Minería Superficial federal (conocida como SMCRA, por sus siglas en inglés) que ha permitido que algunas de las mayores...